25 nov 2012

The wind beneath my wings



Alitas de pollo, como ensayo en escala antes del
gran evento de fin de año.

El procedimiento, después del corte.










3 kilos de alas de pollo (18 mangos en una granja de Villa Crespo). Venían con los torsos incluídos, pero le pedí al Granjero Lin que los separe.

Con un hachita, separar las tres partes de cada ala. Las puntas se guardan junto con los torsos, para una futura sopa. Las otras dos partes van al marinado nocturno (una lata de coca-cola, sal, pimienta, pimentón, ají molido, ajo y perejil).


Al día siguiente, acomodarlas sobre una rejilla, y al horno. 30 a 35 minutos, dando vuelta una vez a media coccion y pincelando con la marinada.

Se sentirá el olor a caramelo proveniente de la quemazón de la coca-cola.

De haber tenido salsa barbacoa a mano, le hubiera untado un poco en el curso de la cocción.

Voilá ! (a ponerse el babero, en francés). El amigo y guest chef Klaus sugiere un dip de queso azul para acompañar, yo me inclino por la clásica barbacoa y/o mostazas varias.

Salieron muy ricas, aunque es bastante laburo para el poco tiempo que pasás comiéndolas.

5 comentarios:

Gabriela dijo...

eso es muy rico!! lo voy a implementar en casa para la manada.

Con alguna salsa barbacoa o tbm con alguna chutney (en bodegas Amparo venden una de mango que es una cosa de locos).

Hegeliano dijo...

Aja, para eso guardo la lata de chiplotes ahumados La Costeña. Buena idea, dos litros de Heineken y a disfrutar de la vida.

Unknown dijo...

Se ven muy buenas, voy a probar el tema Coca Cola. Nunca lo intenté.

Normalmente mi manera es dorarlas en una Essen, retirarlas y hacer una reducción con 2 cucharadas de aceto balsámico, tipo Módena, mas dulzón, 1 cucharadita de miel y otras 2 cucharadas de salsa de soja, hasta que se empiece a caramelizar por la miel, ahi las vuelvo a agregar hasta que tomen colorcito. Sal y pimienta. Acompañar con escamas de batatas fritas (cortada tipo Lays).

Anónimo dijo...

Cuenten todos los que vayan al asado que tal estuvieron las alitas del chef!

Fernando dijo...

Tengo la satisfacción de poder certificar que las alitas estuvieron espectaculares! La concurrencia dio buena cuenta de ese corte avícola habitualmente poco valorizado, aún en presencia de un señor asado (del que por supuesto también solo quedaron los huesos).